Síntomas del vértigo es un tipo específico de vértigo que a menudo describimos como una sensación de movimiento y giro (National Instiutes of Health, 2010).
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Síntomas de mareos, causas, tratamientos.
En muchos casos, es comparable a la sensación de mareo tradicional del vértigo en sí mismo, ya que las personas que tienen vértigo tienden a sentir que realmente se están moviendo o girándose a golpes (Institutos Nacionales de Salud, 2010).
Los síntomas del vértigo suelen manifestarse como náuseas, pérdida del equilibrio o pérdida inminente del conocimiento (DM, 2016).
Por otro lado, las causas del vértigo pueden ser diversas, generalmente relacionadas con aspectos del oído interno o del cerebro. Algunas de estas causas pueden ser leves o más graves, mientras que otras pueden incluso amenazar la supervivencia del individuo (Furman et al., 2016).
Asimismo, según la causa etiológica se pueden distinguir diferentes tipos de vértigo: vértigo rico periférico (oído interno y afecta al nervio vestibular) y vértigo vècentral (debido a alteración neurológica) (DM, 2016).
El tratamiento de los mareos y mareos dependerá tanto de sus causas, tipo como de los síntomas que tenga la persona. En general, los métodos empleados son efectivos para el tratamiento sintomático (Mayo Clinic, 2015).
¿Qué es el vértigo?
El vértigo se ve definido por la presencia de sensaciones de movimiento de balanceo, inclinación o giro (Cliveland Clinical, 2015) todo a su alrededor se mueve y además estas sensaciones se presentan incluso cuando se está en estado de reposo, de pie o acostado (Cliveland Clinic , 2015).
Los mareos, los mareos de y la sensación de desequilibrio son síntomas que los adultos informan con mucha frecuencia cuando acuden a los métodos de atención. Médicos de atención primaria (Asociación de trastornos vestibulares, 2016).
Todas estas sensaciones (mareos, vértigo y desequilibrio ) pueden ser tanto un trastorno del nivel de riqueza vestibular periférico (disfunción de las diversas estructuras del oído interno) como un trastorno vestibular central (disfunción de uno o más dominios del sistema nervioso central esenciales para procesamiento de señales e información espacial) (Asociación de Trastornos Vestibulares, 2016).
Aunque estas tres condiciones pueden estar relacionadas por la causa subyacente o por las sensaciones asociadas, pueden tener diferentes significados:
- Vértigo: Esta es una sensación de inestabilidad, pérdida inminente del conocimiento o desmayo.
- Vértigo: a diferencia del vértigo, se caracteriza por la presencia de un componente de movimiento. La persona puede tener la sensación de moverse o dar vueltas o más bien que las cosas a su alrededor lo están haciendo.
- Desequilibrio: este término generalmente se describe como la sensación de inestabilidad que suele ir acompañada de desorientación espacial.
¿Cuáles son los síntomas del vértigo?
Los síntomas y signos más comunes del vértigo suelen incluir algunas o más de las siguientes sensaciones (Furman et al., 2016):
- Sensación de giro y movimientos giratorios.
- Sensación de oscilación e inclinación.
- Pérdida de equilibrio
Los pacientes suelen describirlos como “Siento que todo da vueltas”; “La habitación y todo gira a mi alrededor”; “Todo se mueve y siento náuseas”.
Generalmente, los síntomas se alternan, pueden aparecer y desaparecer. Pueden durar desde segundos hasta horas y días. Por otro lado, estas sensaciones también pueden agravarse si se realizan movimientos bruscos con la cabeza o si se realiza un cambio de posición (Furman et al., 2016).
Además, también hay que tener en cuenta que cuando una persona tiene vértigo puede desarrollar alguna de las siguientes condiciones (Furman et al, 2016.):
- Náuseas y vómitos
- Dolores de cabeza, sensibilidad a la luz o al ruido.
- Visión doble o dificultad para enfocar el campo de visión.
- Dificultad o incapacidad para hablar o tragar.
- Sentirse débil, cansado y cansado.
- Dificultad para respirar normalmente.
- Sudoración intensa
- Sensación de púlpitos
- Pérdida de audición o zumbido en los oídos.
Esta amplia variedad de síntomas tendrá también repercusiones cognitivas y psicológicas, principalmente por el cansancio mental provocado por los constantes síntomas de inestabilidad y mareos.
- Trastornos cognitivos: dificultad para concentrarse; atención distraída; pérdida de memoria y pérdida de memoria a corto plazo; confusión y desorientación; dificultad para entender comandos o instrucciones simples; dificultad para seguir instrucciones, dificultad para seguir conversaciones, etc. (Asociación de Trastornos Vestibulares, 2016).
- Repercusiones psicológicas: pérdida de autonomía, autoconfianza y/o autoestima; ansiedad, pánico y aislamiento social (Asociación de Trastornos Vestibulares, 2016).
¿Es muy común el vértigo?
El mareo y el vértigo son dos patologías muy frecuentes en las consultas médicas de atención primaria y hospitalaria (Batuecas-Caletrío, 2014).
Por lo general, esta patología puede afectar a cualquier persona; sin embargo, es más común en la población adulta (Vestibular Disorders Association, 2013).
A pesar de ello, cuando se desarrolla en la población infantil, suele presentarse como una crisis espontánea y transitoria. En el caso de las personas mayores, las sensaciones de vértigo y mareo pueden evolucionar hacia una situación de inestabilidad crónica (DM, 2016).
Aunque existen pocas estadísticas sobre esta condición médica, diferentes institutos nacionales de salud de los Estados Unidos han estimado que casi 90 millones de ciudadanos han acudido al médico de vez en cuando para marcar el padecimiento de las sensaciones de vértigo y vértigo (Vestibular Disorders Association , 2013).
Por tanto, alrededor del 42% de la población ha sido objeto de algún tipo de consulta médica en relación a problemas relacionados con mareos y mareos (Vestibular Disorders Association, 2013).
Tipos de vértigo
Los mareos se pueden clasificar de diferentes formas. La categorización más habitual se realiza según sus causas (Clínica Universidad de Navarra, 2016):
- Vértigo periférico: se produce como consecuencia de la afectación de diversas estructuras del oído interno y del nervio vestibular. Es el tipo de vértigo más común en el que los pacientes suelen presentar síntomas como tinnitus, presión y/o dolor en los oídos (Clínica Universidad de Navarra, 2016).
- Vértigo central: se produce como consecuencia de una alteración importante de los mecanismos neurológicos del sistema vestibular. En este tipo de vértigo se suele observar una marcha anormal, cambios posturales, inestabilidad severa, visión doble, fuertes dolores de cabeza e incluso trastornos de la deglución (Clínica Universidad de Navarra, 2016).
Además, el vértigo puede ser subjetivo en función de las sensaciones de movimiento percibidas (MD, 2016).
Causas: Síntomas del Vértigo
El vértigo es un tipo de patología que implica una disfunción y/o alteración del sistema vestibular, ya sea a nivel central o periférico.
El sistema vestibular está formado por un conjunto de estructuras que serán fundamentales para el mantenimiento postural y el equilibrio. Comprende tanto los sistemas periféricos (oído interno, nervio vestibular) como la computadora central (núcleos oculomotores, neuronas motoras de la médula espinal, cerebelo, centros vestibulares de la corteza cerebral).
Por un lado, el vértigo periférico puede presentarse por diferentes condiciones (Institutos Nacionales de Salud, 2010):
- Vértigo postural benigno
- Medicamentos: antibióticos, diuréticos, silicatos, etc.
- Lesiones en zonas periféricas por traumatismo craneoencefálico.
- Procesos inflamatorios de los nervios vestibulares.
- Diversas enfermedades y patologías, como la enfermedad de Ménière.
- Procesos tumorales que ejercen presión sobre los nervios vestibulares.
Por otro lado, el vértigo central puede desarrollarse por diferentes condiciones (Institutos Nacionales de Salud, 2010):
- Trastornos y accidentes cerebrovasculares.
- Uso de diversos fármacos: ácido acetilsalicílico, alcohol, anticonvulsivos, entre otros.
- La migraña
- Desarrollo de episodios convulsivos y epilepsia.
- Tumores cerebrales
En general, las condiciones que pueden producir vértigo se resumen en (DM, 2016):
- Vértigo: personas propensas a sensaciones de movimientos bruscos, balanceos, etc., en las que el oído interno es especialmente sensible al movimiento.
- Infecciones: Ciertas infecciones virales o bacterianas pueden afectar la funcionalidad y la estructura del oído interno.
- Regulación deficiente o anormal de la presión arterial (hipertensión o hipotensión).
- Patologías neurológicas: trastornos craneoencefálicos, tumores cerebrales, ictus, enfermedades desmielinizantes, etc.
Factores de riesgo
La edad se considera un factor importante para padecer vértigo. Los adultos mayores tienen más probabilidad de desarrollar patologías que de salud que pueden ser la causa etiológica de mareos y mareos. Por otro lado, también ingieren medicamentos que pueden causar esta condición clínica (Mayo Clinic, 2015).
Además de la edad, cuando ya se han experimentado episodios previos de vértigo, es posible que la susceptibilidad a este tipo de patología sea mayor (Mayo Clinic, 2015).
Diagnóstico Síntomas del Vértigo
Cuando una persona acude al médico con un cúmulo de síntomas que pueden ser diagnosticados como mareos, los especialistas suelen realizar un examen físico para determinar la posible causa subyacente (nté, 2016).
Por lo general, se realiza una prueba de visión y audición. Es fundamental realizar el examen físico de ojos y ojos, además se realiza un análisis postural y pruebas para determinar la capacidad de equilibrio del paciente (Healthline, 2016).
Para abordar la causa que se considere más probable (periférica o central), también se requerirán pruebas de neuroimaven como CT o RMF (nté, 2016).
Tratamientos
Cuando es una condición leve, sin vértigo de causa física importante, el vértigo suele mejorar sin intervención terapéutica (Mayo Clinic, 2015).
Cuando el vértigo se convierte en una situación más grave, con una causa identificada y además interfiere significativamente en la vida diaria de la persona, será necesario buscar intervención médica.
Generalmente, el tipo de tratamiento a utilizar dependerá tanto de la gravedad de los síntomas, del tipo de vértigo, como de la causa etiológica.
Por tanto, la intervención puede realizarse a nivel sintomatológico o sobre la causa del desarrollo de mareos y vértigos.
Medicamentos (Clínica Mayo, 2015)
- Diuréticos: los especialistas pueden prescribir la toma de diuréticos cuando se identifique la presencia de la enfermedad de Ménière. Los diuréticos combinados con una dieta baja en sal pueden ayudar a reducir los episodios de mareos e inestabilidad.
- Fármacos que reducen la sensación de mareo: antiestamínicos, anticolinérgicos.
- Medicamentos que reducen las náuseas.
- Medicamentos utilizados para el tratamiento de la ansiedad: Las benzodiazepinas se pueden prescribir para el tratamiento sintomático pero pueden causar dependencia y somonalidad.
Intervención no farmacológica (Mayo Clinic, 2015)
Maniobras en la posición de la cabeza: el reemplazo de Epley o la manipulación canicular pueden ayudar a aliviar los síntomas del vértigo posicional. Debe ser realizado por un especialista (médico, audiólogo o fisioterapeuta) y generalmente es efectivo después de dos o tres inyecciones.
Terapia de equilibrio: mediante diversos ejercicios se puede aprender a adoptar una postura que altere lo mínimo posible el sistema de equilibrio del cuerpo. Una de las terapias con este objetivo es la rehabilitación vestibular.
Otros procedimientos (Clínica Mayo, 2015)
También se pueden realizar intervenciones en el oído interno (inyecciones o procedimientos quirúrgicos) para desactivar zonas o eliminar el órgano sensorial.
Estas técnicas suelen utilizarse con frecuencia, lo que sucede si la persona tiene una pérdida aditiva severa y si el vértigo y los mareos no han respondido al tratamiento.
Bibliografía
https://www.betterhealth.vic.gov.au
https://www.mayoclinic.org
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov
https://www.ent.uci.edu
https://www.healthline.com
https://www.msdmanuals.com
https://emedicine.medscape.com
https://www.mdpi.com
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